¿YO O EL OTRO YO?

Un día estupendo.
No problem.
Funny.
Y de repente... BAJÓN.
He hecho reír, me he reído, he creído que era posible dar una patada en el culo a los malos pensamientos. De verdad, me lo he creído, y, con certeza, se lo han tragado los que estaban a mi alrededor.
No lo entiendo.
Mi mundo hoy ha sido perfecto.
He crecido hasta los 3 metros para, después, hacerme tan pequeña que sentía que una hormiga a mi lado era un gigante.
¿Qué ocurre? ¿Quién de esas dos personas soy en realidad, o, por lo menos, la mayoría del tiempo?
¿Acaso soy sólo una sombra de las dos y no estoy definida?
Puede ser...
Me asusta.
Y es que, a pesar de la enorme dicha que hoy me ha embriagado, en el fondo la tristeza siempre gana la batalla.
Aún hay esperanza.
Sólo es una batalla, la guerra final está por decidir.
Lucharé. Sí.
Pero mientras tanto siento que mi mundo es sólo una apariencia.
Como decía F. Mercury:

"The show must go on, the show must go on,
Inside my heart is breaking,
My make-up may be flaking
But my smile still stays on."



POR DENTRO MI CORAZÓN ESTÁ ROTO, MI MAQUILLAJE DESCONCHADO, PERO YO SIGO SONRIENDO.
Me quedo con esto. Chitón.

P.D: muy sexy la combinación minifalda-bigote.

NO A QUE SÍ

Hay que saber decir NO.
Sé que muchas veces es difícil pronunciar esta palabra tan breve, tan simple, tan rotunda, pero es que no podemos acceder siempre a los deseos de los demás sólo por el mero hecho de hacerles sentir bien.
Ya está bien. Es hora de pensar en uno mismo, de plantarle cara al asunto y de decidir teniendo en cuenta lo que uno quiere.
¿Daño? Sí, se puede provocar, pero soy egoísta (al menos hoy) y deseo hacer y decir lo que en ese momento se me pasa por la cabeza, me apetece o, simplemente, se me encapricha (por no decir que "me sale del chichi").
NO.
Que no quiero.
Que no me da la gana.
Que ahora soy yo y yo y yo otra vez más.
Fin de la historia.