Hay que saber decir NO.
Sé que muchas veces es difícil pronunciar esta palabra tan breve, tan simple, tan rotunda, pero es que no podemos acceder siempre a los deseos de los demás sólo por el mero hecho de hacerles sentir bien.
Ya está bien. Es hora de pensar en uno mismo, de plantarle cara al asunto y de decidir teniendo en cuenta lo que uno quiere.
¿Daño? Sí, se puede provocar, pero soy egoísta (al menos hoy) y deseo hacer y decir lo que en ese momento se me pasa por la cabeza, me apetece o, simplemente, se me encapricha (por no decir que "me sale del chichi").
NO.
Que no quiero.
Que no me da la gana.
Que ahora soy yo y yo y yo otra vez más.
Fin de la historia.
2 comentarios:
Toma yaaaaaaa!!!!!!!
Un no a tiempo soluciona futuras subidas a la chepa.
También soy de la opinión de que hay que saber decir que no y que de vez en cuando, está bien quererse a una misma.
De todos modos, ya me lo explicará con más detalle no?
Besos!!!
Jajajaja.
No hay mucho que explicar. Es sólo que, a veces, por la mayor tontería, salta la liebre.
Muaksss.
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